Concepto del Asesor Financiero

La idea generalizada del Asesor Financiero es la de un empleado de banca que presta una atención personalizada a su cartera de clientes.

El Asesor Financiero da un paso más allá de esta idea general. El Asesor Financiero es un gestor comercial, vinculado 100% con los retos de sus Clientes, que aúna sus esfuerzos en la extinción de los déficit de los mismos, mediante los conocimientos y medios que posee, una visión global, cartera de clientes, conocimientos del medio, preparación, dedicación, visión financiera y sobre todo, en el formato de Franquicia con el apoyo y ejecución de la Central Franquiciadora.

Objetivos del Asesor Financiero

El objetivo principal del Asesor Financiero  es ayudar al empresario con las gestiones del día a día a través de un paquetes integrados de soluciones, en las áreas de la empresa: apoyo comercial, finanzas, jurídico, contabilidad, subvenciones, gestión de la calidad, nuevas tecnologías, formación, seguros, morosidad, etc.

Asesoramiento a pymes, marketing y publicidad, consultoría, servicios financieros, formación… Los servicios que requieren las empresas y los particulares son de lo más variado y convierten a este sector en un conjunto muy heterogéneo de enseñas enfocadas, en muchos casos, a nichos muy concretos.

Dependiendo del perfil de los clientes y la situación económica les afecta de distinta manera: “Las orientadas al mundo empresarial, y más concretamente a la industria, tienen más posibilidades de crecimiento por la incipiente recuperación que se está empezando a dar; las enfocadas a particulares aún no notarán la recuperación este año”.

La situación económica está íntimamente ligada al crecimiento de las operaciones realizadas por las empresas de consultoría y asesoría: Especialmente teniendo en cuenta que muchas se han apuntado a externalizar tareas para que las realicen empresas especializadas en servicios de gestoría, consultoría, asesoría, morosidad, formación, LOPD. etc.

La Cartera de Clientes

Los franquiciados de este sector de Asesorías Financieras, al tener centralizado en la enseña casi todas las labores de ejecución, disponen de maniobrabilidad, para realizar labores de captación de clientes fuera de oficina (la cual en muchos casos no es necesaria),  obteniendo así tiempo exclusivo a la captación de Clientes los cuales suponen finalmente una cartera propia a los cuales además les podrá proporcionar con el apoyo de la Central una dedicación muy  personalizada.

Además el Asesor Financiero generalmente entra directamente en un magnífico plan de formación a través de la Central mediante cursos presenciales en la propia central y Online con  una amplísima carta de cursos moldeados completamente al momento y a las necesidades del Cliente.